Ir al contenido principal

EL HUECO


La salida de Gaspar Zarrias del gobierno andaluz, más allá de las consecuencias personales del interesado, se está dejando notar en la provincia de Jaén en un enorme hueco que nadie parece estar dispuesto a llenar. La agenda informativa anda huérfana de asuntos en los que, estos de la cosa pública, no saben por donde andan, deben andar o anduvieron los tiros. Nadie abre la boca y nadie se expone ante la opinión pública para no meter la pata o la lengua en estos tiempos de tribulación política en los que se anuncia el recorte, a la mitad, de las delegaciones provinciales del gobierno regional y la elección de las cabezas alcaldables. Tan es así que la agenda informativa la está marcando la oposición pepera con su insistencia microfónica un día si otro también.Basta que el candidato del PP diga que dónde está la ciudad sanitaria para que salgan como un resorte PSOE y ayuntamiento socialista a contestar a los de la gaviota.

Curiosa situación esta en la que el hueco informativo de Zarrías lo vaya ocupando el adversario porque los propios no tengan nada que decir y eso en la cosa pública es cosa mala.

Comentarios

Danillana ha dicho que…
Aunque tenga mando en plaza, no es lo mismo querer en la distancia. Al final, Agudo, los de la gaviota le tenían mucho miedo y han empezado a moverse cuando ya no está.
Jesús Martínez ha dicho que…
La iniciativa en política es algo bastante importante. Sin embargo, todo debe tener su medida y, en ocasiones, el PP no la tiene cogida (la dosificación también forma parte de la actividad política). De todas formas, está claro que el hueco de GZ es grande, muy grande...

Entradas populares de este blog

CAGANÉ ESTREÑIDO

En Cataluña dicen que van a cambiar la Navidad por la fiesta de invierno y la Semana Santa por la fiesta de la primavera. Una consejo del Consejo Escolar de la región. Es decir que el popular "caganer" se quedará sin sitio para hacer sus deposiciones ya que en la fiesta de invierno no caben tampoco los belenes. La verdad es que cada día que amanece el número de tontos crece y no paran de buscar agujeros para meter la pata por decreto. Por el momento en los colegios de Jaén está permitido que los chavales se deseen felices Pascuas, pero si la ola catalana prospera de dificil manera se podrá casar ideologicamente la imagen de la alcaldesa socialista entregando, arrobada, su bastón de mando a la imagen de Nuestro Padre Jesús con esta mania de sustituir el crucifijo por una foto del presidente autonómico o a los reyes magos por un vejete con sobrepeso vestido de terciopelo rojo.

METER LA PATA HASTA EL CORVEJÓN

Lo de meter la pata hasta el corvejón es algo innato en el ser humano desde la mas remota antigüedad. De hecho si los animales tuvieran esa capacidad, que no la tiene todavía, dirían hemos metido la pierna.Quizás la primera gran metedura de pata de la historia fue la del “hombre antecesor” mientras caminaba por la sierra de Atapuerca, con tan mala fortuna que a meter la pata en la sima de los huesoso y o volvió a salir de allí hasta un millón de años después.Metió la pata también, Viriato, al elegir a sus colegas de farra guerrillera o al pagarles un sueldo tan esmirriado que en cuanto vieron brillar el oro romano tomaron las de VilladiegoY es que todos metemos la pata pero lo peor es que quede escrita en la historia por los siglos de los siglos y lo que era algo articular pasa al dominio público para que se publiquen libros y se hagan chascarrillos.Otro gallo le hubiera cantado a Dupont, mucho menos el de la cárcel de aquel castillo, si no hubiera metido la pata en Bailén, donde Casta

DIARIO DE UN CONFINADO II

A lo largo de las últimas semanas se está produciendo un fenómeno curioso. Basta con poner atención para percibir el latido vital de nuestros pueblos y ciudades. Abran sus balcones y ventanas y oirán lo que siempre pasaba y que no percibíamos. El encierro al que estamos sometidos los ciudadanos y a la parálisis obligada de sus herramientas y mecanismos está sacando al primer plano todos los ruidos que quedaban sepultados por la cacofónica actividad de nuestras rutinas diarias. El trino de los pájaros es una de las voces principales y las conversaciones de nuestros vecinos, con un poco de atención, se vuelven inteligibles y nos damos que las nuestras también pueden ser oídos por el resto de nuestro barrio. El silencio de los primeros días de confinamiento nos había atronado los oídos y estos, poco a poco, van sacándoles los matices a esa irreal banda sonora que por primera vez escuchamos. Estamos en momentos de muchas primeras veces. Estamos estrenando sensaciones que teníamos aga