Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2015

MMM…MMM…MMM

Mmmmm. Llevo así, reflexionando desde el pasado sábado. Ando reflexionando y cuanto más lo hago. Ahí voy otra vez, mmmmmmm. Menos me entero de lo que está pasando. Como esto de las elecciones siga así van a tener que poner otro día para pensar, además del que ya existe para decidir que papeleta escoges, en como interpretar las interpretaciones que se hacen los datos electorales. Ya no es que todos ganen, que es algo que me parece muy bien porque el masaje democrático debe tener final feliz para todos, es que ahora todos pierden al mismo tiempo y lo hacen de una manera enrevesada y liosa que por mucho que uno se dedique a reflexionar con ahínco menos claro está. Por mi trabajo me he chupado veinte ruedas de prensa de análisis de los resultados, este periódico publicó un notable tocho con todas las claves de la noche electoral, he visto ocho o diez telediarios nacionales. Abusé de mi TDT buscando en los canales recién sintonizados los noticieros regionales. A mi telefonillo le he

EMBROLLO

Anda Susana perdida en su laberinto preguntándose ¿quién la habrá robado el queso y el peso del armiño? Recorre los pasillos conjugando el verbo dialogar en futuro imperfecto del subjuntivo: yo dialogare, tu dialogares, el dialogare, nosotros dialogáremos, vosotros dialogareis, ellos dialogaren. Las fuertes pisadas retumban por los corredores solitarios a la espera de que pase algo. Tacones de aguja, suelas de esparto, de goma y cuero. Mocasines, bambas, deportivas y botas de acampada. La discusión va a ras de suelo para no ser captada por los radares. Quizás por eso le pidieron a algunos periodistas que se pusieran de rodillas ante Susana para recoger sus palabras, ocurrió en la bulla expolivera, y por eso mismo todos nos quedamos de pie, sacando la cabeza por encima de tanto recoveco y jerigonza para tapar vergüenzas propias y ajenas. El asunto está tan embrollado como dos cachorros de gato con una madeja de bramante. Los caminos, los conocidos y los secretos, los transi