En
Jaén somos muy de ver el césped más verde en la casa del vecino. Pero siendo
fieles a nuestra idiosincrasia sería más apropiado decir que: los de Jaén somos
de ver más cargadas las olivas del lindero que las nuestras. No estamos a gusto con casi nada y ese runrún se nos va
en mascullar echando la liagílla o tomando el café mañanero. Tenemos la
creencia; a todas luces ilógica; que todo lo de fuera es mucho mejor.
—
Dónde se pongan los corteingleses de Graná o Málaga que se quite el de Jaén.
—Para
centros comerciales los de por ahí, menudos prycas, tienen de tó no cómo aquí
que no hay de ná.
—Pues
menudo aceite tienen los payeses…y lo venden toíco envasao y a precio de oro.
—
Y vaya bosques hay en el norte
—Y
de las catedrales qué… la entrada es más cara que en Jaén, pero vale la pena ¡Menudos
monumentos!
—
Es que aquí no hay de ná. Ni de marcha puedes salir
—Por
ahí no te ponen tapas pero sales de chikitos y pintxos y… hombre… eso hay que
pagarlo pero vuelves cenao
—Eso
es verdad aquí mucha tapa pero luego es tó pan y mazacote….
—Lo
que faltaba es que nos cobraran la tacica caracoles, las papas aliñás o el lomo
de orza.
—En
Jaén si quieres poner taberna o preparas buena cocina o ya sabes.
—
Otra cosa en lo que pasa por otros laos. Otras culturas, otras costumbres
—Es
que en Jaén no hay de ná, Mira los catalanes que bien venden el pan tumaca. Tienen
ojo clínico para el marquetín ese. Y aquí todavía andamos con las tostadas con
tomate, jamón y aceite de oliva virgen extra.
—No
avanzamos ni patrás
Todo
esto y mucho más se escucha a poco que pongas la oreja. Y eso que en Jaén podríamos
sacar pecho por tantas y tantas cosas pero estamos atrapados en una desesperanza
en forma de jota y deslumbrados por el oropel de los extranjerismos que inflan el
lenguaje. A mí, por ejemplo, ya me ha propuesto cambiar el nombre de este
Poyete y rebautizarlo como High Step. Me cuentan que da caché que quedaría
mejor, más cool en mi time line, en las RRSS y que en lugar de opinar en esta
páginas mejor que fuera influencer.
Pero
esto convencido que a los de Jaén no se
nos da peor ni mejor lo de madrugar y sacar a la familia adelante. Tenemos la
realidad que tenemos. Es lo que hay y lo que nos dejan. Pero también creo que sí
tenemos un paisano en Marmolejo, condenado a un año y medio de cárcel por un
delito de tenencia de armas prohibidas, que es una estrella internacional en el
mundo prepper, tíos que se preparan para sobrevivir al apocalipsis. Si hay peña
como el ibreño José María P.C que debe al fisco casi cinco millones de euros y
que está al mismo nivel deudor «grandes
morosos» y magnates, deportistas y artistas como Gerardo Díaz Ferrán, Arturo
Fernández, Dani Pedrosa, 'Sandokan', José Luis Moreno, Mario Conde, Lorenzo
Sanz o Gabi Milito. Si eso es así puede que no esté todo perdido.
Así
que me pregunto ¿si hay talento para el mal habrá talento para el bien? y si es
así quizás aflore el talento colectivo necesario para elegir a alguien adecuado
que nos lidere y evite que todas estas habilidades se nos vayan por el sumidero
de la crónica negra. A lo mejor a partir de ese momento dejamos de decir
—Es
que en Jaén no hay de ná
Y empezamos
a creer que podemos tener de tó. Lo primero que hay que hacer es emepzar a cuidar, a regar
y a abonar nuestro olivar tal y cómo lo hace el vecino. Depende de nosotros que
la cosecha o el césped luzca igual o más verde que el suyo
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