Ir al contenido principal

ME PICA TÓ



La primavera es lo que tiene que te pone los glóbulos rojos y blancos en ebullición y eso claro te altera y de ahí viene el refrán. Que se te pone la sangre loca y así claro a uno le pica todo y de todo.

Es decir que te pican sitios de tu cuerpo que no creías que ni existían y te pican cosas que tampoco habías visto en tu vida. Además, ahora, resulta que los ácaros, los pólenes, los alérgenos del ciprés, el olivo, la encina, el falso plátano, el pino verdadero y hasta las petunias y las gramíneas empiezan a expeler sustancias microscópicas que hacen que se te pongan los ojos rojos, que las mucosas te goteen de la nariz, que te salgan pelillos de las orejas y que todos tus orificios corporales empiecen a pedir una esquina para rascarse.

Así que ahí andamos con la boca inflamada por la cortisona y el urbason para contener la picadura de un avispón chino, que como no teníamos bastante con las avispas españolas, ahora vienen hasta de la China. Con los ojos como un conejo con mixomatosis y generando cada pitarra como la garra de una puma.

Los brazos comidicos por el sarpullío y el lomo con costras de rascarnos hasta que nos gusta, ahí hasta el fondo, por culpa de los ácaros del polvo que en primavera tienen el tamaño de la moto de Dani Pedrosa.

Y es que en la primavera me pica desde la pri hasta la vera pasando por la ma y lo estoy escribiendo en mayúsculas que picor se escribe con P de Primavera

Comentarios

Entradas populares de este blog

La ITI es un “Macguffin”

Desde hace unos meses que andan los actores políticos de aquí para allá y de allá para aquí dándole vueltas a los millones de la Inversión Territorial Integrada, la celebérrima ITI, y en qué se los van a gastar. Una día sí y otro también los papeles y los micrófono recogen las declaraciones de los artistas protagónicos, secundarios y hasta de los extras que están para hacer bulto y ruido en la escena, sobre el destino de los más de 400 millones que van a llegar a esta provincia tan ajena a las alegrías presupuestarias y tan huérfana de cariño administrativo. Qué si una carretera, que si un polideportivo, que si una rotonda, que si una plazoleta, que si un teatrico, que si una piscineja, que si tal que si para cual y para lo de más allá. Así llevan semanas amasando la ITI y sus dineros de comarca en comarca y de casa consistorial a casa consistorial prometiendo que la lluvia, de millones, está al caer y que habrá que ir comprándose cubos, barreños, damajuanas, orzas,   tazones...

CAGANÉ ESTREÑIDO

En Cataluña dicen que van a cambiar la Navidad por la fiesta de invierno y la Semana Santa por la fiesta de la primavera. Una consejo del Consejo Escolar de la región. Es decir que el popular "caganer" se quedará sin sitio para hacer sus deposiciones ya que en la fiesta de invierno no caben tampoco los belenes. La verdad es que cada día que amanece el número de tontos crece y no paran de buscar agujeros para meter la pata por decreto. Por el momento en los colegios de Jaén está permitido que los chavales se deseen felices Pascuas, pero si la ola catalana prospera de dificil manera se podrá casar ideologicamente la imagen de la alcaldesa socialista entregando, arrobada, su bastón de mando a la imagen de Nuestro Padre Jesús con esta mania de sustituir el crucifijo por una foto del presidente autonómico o a los reyes magos por un vejete con sobrepeso vestido de terciopelo rojo.

DIARIO DE UN CONFINADO II

A lo largo de las últimas semanas se está produciendo un fenómeno curioso. Basta con poner atención para percibir el latido vital de nuestros pueblos y ciudades. Abran sus balcones y ventanas y oirán lo que siempre pasaba y que no percibíamos. El encierro al que estamos sometidos los ciudadanos y a la parálisis obligada de sus herramientas y mecanismos está sacando al primer plano todos los ruidos que quedaban sepultados por la cacofónica actividad de nuestras rutinas diarias. El trino de los pájaros es una de las voces principales y las conversaciones de nuestros vecinos, con un poco de atención, se vuelven inteligibles y nos damos que las nuestras también pueden ser oídos por el resto de nuestro barrio. El silencio de los primeros días de confinamiento nos había atronado los oídos y estos, poco a poco, van sacándoles los matices a esa irreal banda sonora que por primera vez escuchamos. Estamos en momentos de muchas primeras veces. Estamos estrenando sensaciones que teníamos aga...